Articulo original : https://remnantnewspaper.com/web/index.php/articles/item/7056-reminder-of-how-to-build-social-skills-in-children

jueves, 22 de febrero de 2024, Traducido por Elisa Hernández

Siendo testigos de la creciente falta de aptitudes sociales en la juventud, es fácil concluir que la ausencia de la madre en el hogar de la sociedad moderna se ha hecho bastante evidente y perjudicial para la unidad familiar y para el mundo.

Recordemos entonces a todos cuáles son las habilidades sociales básicas que los niños deben aprender porque son el camino natural hacia el éxito. La mayoría de ellas solían ser enseñadas por los padres a sus hijos y la mayoría ya estaban adquiridas a la edad de 12 años en el pasado. 

Esta lista puede ayudar a los padres jóvenes a evaluar adecuadamente sus propias competencias parentales:

Seguir instrucciones

Agradecer

Compartir

A respetar la propiedad ajena

Pedir permiso para tocar las cosas de los demás

Devolver a tiempo los objetos prestados

Comprender el espacio personal

Respetar los límites personales de los demás

Regular las emociones

Utilizar estrategias de adaptación

Utilizar el control de sí mismo

A manejar su Irritación y la frustración de forma constructiva

A expresar adecuadamente los sentimientos y las emociones

A mantener la calma en momentos de estrés

A afrontar las preocupaciones de forma saludable

A pedir consejo y saber qué personas están cualificadas para darlo (reconocer que los amigos no suelen ser las personas más indicadas para dar consejos, sino los padres y, en su defecto, otros adultos de confianza de los propios padres).

A hablar cuando sea su turno

A no interrumpir cuando otros están hablando

A tener una actitud positiva

A mostrar empatía

Ya es hora de acabar con el dicho moderno de que ahora la adolescencia es más larga y con las burlas a las personas del pasado que eran capaces de formar a sus hijos de esta manera.  

Saber ver la perspectiva de otra persona

Pensar en los sentimientos de los demás

Saber transigir

Saber disculparse

Ver cómo las propias acciones pueden afectar a los demás para bien o para mal

Enfrentarse a los problemas y conflictos sin recurrir a la violencia

A pensar en soluciones a los problemas

Ser un buen perdedor en los deportes y los juegos

Saber jugar en equipo

Pensar antes de hablar

Pensar antes de actuar

Expresar adecuadamente sus ideas

Apreciar las diferencias

Sopesar las opciones antes de elegir qué hacer

Comprender cuáles son las diferentes opciones en cada situación

Comprender las consecuencias que puede acarrear cada elección

Asumir la responsabilidad de sus propios actos

Aceptar las consecuencias de sus propios actos

Reflexionar

Adquirir habilidades para tomar decisiones

Desarrollar hábitos saludables

Mantener ordenadas sus pertenencias

Cooperar con el mantenimiento del hogar

Mantenerse siempre limpios y de aspecto agradable sin necesidad de ropa estrafalaria, ser esclavos de modas o vestirse y comportarse con afectación

Diferenciar cuándo y dónde cada atuendo es el adecuado

Valorar la sencillez respetuosa por encima del exceso, la inmodestia y la ostentación

No ser continuamente una carga para los demás pero aprendiendo cuándo es adecuado pedir ayuda y hacerlo sin sentirse avergonzado o escondido

Respetar las reglas de la sociedad sin miedo a ir en contra de la sociedad cuando ésta no respeta las reglas de Dios

Ser responsables de las necesidades de sus mascotas

Limpiar lo que ensucian sus mascotas

Conocer los peligros para la salud que puede entrañar cada mascota y a ser precavido al respecto

Respetar que a otros puede no gustarles estar cerca de su propia mascota

Valorar el amor propio, pero sin egoísmo ni excesos

Aprender a frenar a los manipuladores y a los acosadores

Cumplir con las propias obligaciones y deberes

Ser un trabajador en equipo

Desarrollar habilidades básicas de supervivencia

Distinguir cuando otros tienen problemas y buscar ayuda

Reconocer alguna necesidad o problema y esclarecer cuando se sabe cómo

Ser considerado con las necesidades de los demás

Proteger a los más pequeños y a los más débiles

Elegir alimentos y bebidas más sanos en lugar de más sabrosos

No marcar o desfigurar permanentemente su cuerpo con cosas de las que más tarde podría arrepentirse

Respetar su propia alma y las almas de los demás evitando lugares y compañías que conduzcan al pecado.

Estar al margen de las drogas, del alcohol, de los comportamientos ilegales y agresivos y de las acciones relacionadas con las bandas

Tratar a los demás como nos gusta que nos traten.

Evitar el lenguaje vulgar y el uso incorrecto del propio lenguaje porque ofende a Dios y devalúa nuestra propia imagen social y nuestro ser como seres hechos a imagen de Dios.

Y éstas son sólo las aptitudes sociales básicas a las que debemos añadir el desarrollo de las virtudes cristianas. Recordemos que hay muchos mártires entre los niños de tan sólo 13 años, y tal cosa demuestra que esta lista, que parece larga e imposible, no lo es en realidad.

Ya es hora de acabar con el dicho moderno de que la adolescencia es ahora más larga y con las burlas a los pueblos del pasado que eran capaces de formar así a sus hijos.  Añadamos que hace sólo 100 años casi todos los niños a esta edad ya sabían cazar, pescar y arreglárselas para alimentar a la familia si el padre estaba ausente, y las niñas ya sabían coser y tejer su ropa y la de la familia, además de planchar, cocinar, etc. y todos leían mejor, tenían buena ortografía…etc. Hoy pensamos demasiado en enviar un cohete a Marte y manejar robots y drones cuando los niños ya no pueden multiplicar y dividir si no tienen un teléfono móvil en las manos.