Artículo original : https://www.medias-presse.info/agenda-2030-suede/185207/
por Francesca de Villasmundo – 23 enero 2024, Traducido por Elisa Hernández
El llamado calentamiento global está en el origen de las directivas coercitivas puestas en marcha por la ONU a través de la famosa e indigerible Agenda 2030. Suecia, que ha llevado al poder a un gobierno menos proclive a seguir los dictados globalistas, ha decidido congelar algunas de las directivas de la ONU.
El gobierno sueco abandona los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU
«El gobierno sueco abandona los objetivos de la Agenda 2030 de Naciones Unidas», revela el diario conservador de Internet ReMix, que ofrece noticias y comentarios de Europa Central, los países del Visegrád, la República Checa, Hungría, Polonia y Eslovaquia.
La Agenda 2030 sobre el calentamiento global se resfría en Suecia: el nuevo gobierno de derechas está desmantelando los objetivos globales fijados por Naciones Unidas, prosigue ReMix, que detalla las nuevas directivas adoptadas por el país nórdico. En primer lugar, ReMix aplaude los primeros pasos de Suecia en la dirección correcta:
«Suecia ha hecho muchas cosas buenas recientemente. Ya han abandonado los proyectos de energías renovables e impulsado más energía nuclear. En Año Nuevo, Suecia suprimió los impuestos climáticos sobre el combustible, lo que provocó una caída de los precios del gasóleo de más de 4 coronas suecas (0,35 euros) por litro».
En 2022, cuando los socialdemócratas estaban en el poder en Suecia, «el precio del gasóleo alcanzó la friolera de 28 coronas suecas (2,46 euros) por litro. Después de que el gobierno de derechas suprimiera los impuestos climáticos, los precios en el nuevo año eran de casi 17 coronas suecas (1,50 euros) el litro. Esto representa una caída de los precios del gasóleo de alrededor del 39%.
La congelación de la Agenda 2030 en Suecia es una victoria del sentido común
El periódico de Europa del Este señala también que «el anterior gobierno socialista había incluido en sus directivas a las organizaciones gubernamentales suecas una formulación en el sentido de que debían trabajar para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030». En contra de estas directivas, «el nuevo gobierno ha recortado el presupuesto destinado a la cooperación entre municipios y regiones para la Agenda 2030. Y ahora, durante las vacaciones de Navidad, ha eliminado los objetivos de la Agenda 2030 de las directivas emitidas para organizaciones gubernamentales como la Agencia Sueca de la Energía, la Agencia Sueca de Productos Químicos, la Agencia Sueca de Gestión Marítima y del Agua y la Agencia Sueca de Alimentos, entre otras».
Remix celebra con razón este giro de 180 grados de Suecia, que podría dar lugar a otros en Europa:
«Se trata de una gran victoria para los demócratas suecos de derechas, que están encantados con esta decisión. «En general, no vemos ningún valor añadido en los trabajos sobre la Agenda 2030 y acogemos con satisfacción esta evolución», declaró Martin Kinnunen, portavoz de medio ambiente y clima de los Demócratas Suecos. «Bajo los socialdemócratas y los verdes, la Agenda 2030 y la igualdad de género se han aplicado en todas partes, y no creemos que ésta sea una de las tareas más importantes de las autoridades», añadió.»
Suecia ha empezado a ir en contra de los objetivos globales de la Agenda 2030, «¿le seguirá alguien más?», se pregunta ReMix. Una pregunta que esperamos sea respondida en un futuro próximo, ya que la Agenda 2030 es una aberración liberticida y una herramienta para controlar a las poblaciones.
Congelarla, como está haciendo Suecia, es una victoria del sentido común. Una victoria de la realidad sobre la distopía tiránica que Davos quiere instaurar.
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