Articulo original : https://www.medias-presse.info/le-danger-microsoft-plane-sur-le-ministere-des-armees/185269/
por Pierre-Alain Depauw – 24 de enero de 2024, Traducido por Elisa Hernández
El blog Opex360.com – Zone militaire, especializado en noticias militares y geopolíticas y siempre bien informado, ha publicado una información importante, escrita por Laurent Lagneau:
SOFTWARE. Según un informe parlamentario, el Ministerio de Defensa francés corre el riesgo de caer en la «trampa Microsoft».
«Con condiciones, se podría embotellar París», dicen. Pero lo cierto es que Francia estaba bien situada para promover el crecimiento de la microinformática en los años 70, con el microordenador Micral, que se adelantó a los estadounidenses Altaïr 8800 y Apple II, y el proyecto Cyclades, dirigido por el ingeniero Louis Pouzin, que anunció Internet tal y como lo conocemos hoy. Pero las decisiones tomadas entonces, como la elección de la red Transpac [y por tanto del Minitel], hicieron que no pudiéramos aprovechar plenamente estos avances [*]… Al mismo tiempo, al otro lado del Atlántico, una nueva industria estaba debutando.
Así que, a falta de una solución francesa [o incluso europea], el Ministerio de Defensa recurrió al software estadounidense, en particular al suministrado por Microsoft. Obviamente, esto plantea algunas preguntas… Sobre todo cuando se sabe que esta empresa ha colaborado con la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, inteligencia electrónica estadounidense) para reforzar la seguridad de su sistema operativo Windows.
Sea como fuere, en 2009, el Ministerio de Defensa francés notificó a Microsoft un contrato conocido en la prensa especializada como «barra libre», porque permitía a la empresa recurrir al catálogo de programas útiles del editor estadounidense por un precio fijo de 100 euros [impuestos no incluidos] por puesto de trabajo. Y el procedimiento fue opaco, ya que no hubo licitación. A pesar de la polémica, el contrato se renovó en 2013 y 2017, por un importe estimado de 120 millones de euros.
Sin embargo, desde 2021, según APRIL, una de las principales asociaciones de promoción y defensa del software de código abierto, el Ministerio de las Fuerzas Armadas, recurre a la Union des groupements d’achats publics [UGAP] (Unión de grupos de compras públicas) para «el suministro de licencias y la prestación de servicios asociados a los programas por volumen Microsoft AE, OV, AMO y Adobe ETLA».
Evidentemente, el Ministerio de Defensa está tomando todas las precauciones posibles para evitar cualquier riesgo de espionaje. Su «estrategia es […] basarse en capas de encriptación». Es cierto que el sistema operativo lo publica Microsoft y, por tanto, no es soberano, pero los datos no se pueden leer gracias a la encriptación. La arquitectura de seguridad que se ha diseñado para los terminales y centros de datos del Ministerio limita el acceso a los datos no cifrados en caso de compromiso», explican los diputados Anne Le Hénanff [Horizons] y Frédéric Mathieu [Nupes/LFI] en un informe sobre los retos de la ciberdefensa, redactado en el marco de una «misión relámpago» de la Comisión de Defensa.
«Si se han capturado datos cifrados, el Ministerio de Defensa dice que no será un problema grave porque no será posible […] leerlos. Por tanto, Microsoft no tiene acceso a [sus] datos», insisten.
Para las redes clasificadas que utilizan Microsoft Windows, la solución es aún más sencilla: no están conectadas a Internet. Es el caso del Mando de Ciberdefensa [COMCYBER]. «La herramienta de trabajo del Ministerio es la red Intradef, que tiene un nivel «restringido» y en la que no se transmite nada en texto claro. Por tanto, si se intercepta algún dato, será ilegible», explican la Sra. Le Hénanff y el Sr. M. Mathieu.
Dicho esto, el Ministerio de las Fuerzas Armadas también utiliza varios paquetes de software suministrados por Microsoft.
«Para obtener un sistema informático totalmente soberano, necesitaríamos también un sector soberano para los componentes de hardware y su software (procesadores, microcontroladores, etc.), así como un sector para las aplicaciones de software (suite ofimática, navegadores, etc.). Por tanto, el desarrollo de un sistema de información totalmente soberano parece inalcanzable y prohibitivamente caro», subrayan los periodistas.
«En cuanto a Microsoft, su papel se limita a suministrar software. Las infraestructuras sobre las que se ejecuta [el software] son propiedad del Estado y las tareas de configuración y administración son realizadas íntegramente por personal del Estado o empresas de confianza de la Base Tecnológica e Industrial de la Defensa. Hasta la fecha, no está previsto introducir cambios importantes en esta doctrina», continúan.
Sin embargo, esta práctica podría no durar, ya que Microsoft planea comercializar su software «como servicio» (SaaS). En otras palabras, las aplicaciones ya no se almacenarían en el disco duro de un ordenador, sino que se alojarían en un servidor remoto.
«Este riesgo es una verdadera espada de Damocles que pende sobre la protección de los datos gubernamentales, pero sobre todo sobre nuestra soberanía. Esto se debe a que el modelo emergente consiste únicamente en la compra de derechos de uso de soluciones alojadas en el extranjero. Es más, Microsoft ha indicado que en 2030, o incluso en 2027, sólo habrá software SaaS», explicó la Sra. Le Hénanff durante el examen del informe por la comisión. «Dadas sus exigencias de seguridad y soberanía, el Ministerio de las Fuerzas Armadas no puede aceptar esta situación, y hoy es difícil estimar el alcance de los riesgos que entraña», prosiguió.
Más precisamente, el informe advierte de que «la transición de Windows a un enfoque basado en servicios presenta el riesgo de una reducción gradual de la capacidad del Ministerio de Defensa para operar sus propias redes basadas en tecnologías de Microsoft», y se refiere a una «trampa de Microsoft». Por eso pide que «se exploren» las posibilidades que ofrece el software de código abierto, como Linux.
Pero la DIRISI [Direction interarmées des réseaux d’infrastructure et des systèmes d’information / Dirección inter-ejércitos de Redes de Infraestructuras y Sistemas de Información] se muestra claramente prudente al respecto.
«Contrariamente a ciertas ideas preconcebidas, código abierto no significa gratuito y el uso […] de software de código abierto tiene un coste. Reducir la dependencia de Microsoft plantearía problemas de compatibilidad, costaría lo mismo y llevaría mucho tiempo en términos de formación y mantenimiento de las competencias de los administradores», explicó la DIRISI a los dos diputados. «Sobre todo, requeriría un número mínimo de recursos humanos internos dedicados con experiencia en una amplia gama de software de código abierto, lo que parece inalcanzable a corto y medio plazo dada la presión actual sobre los recursos humanos en el sector digital», añadió.
Además, si se tomara la decisión de pasar al software de código abierto, no es seguro que «todas las funcionalidades actuales de la fundación y los sistemas empresariales pudieran conservarse en su estado actual». Y «repercutiría en la capacidad del Ministerio para desarrollar la arquitectura de seguridad de su base y, por tanto, para garantizar su seguridad» y probablemente retrasaría «los trabajos necesarios para garantizar nuestra interoperabilidad con nuestros aliados y la capacidad de Francia para ser una nación-marco[1]«, argumentan los ponentes.
Cabe señalar que, desde hace unos diez años, la Gendarmería Nacional ya ha dado el salto al software de código abierto, con el desarrollo y el uso generalizado de «GendBuntu», un sistema operativo basado en Ubuntu.
[*] Lee: «Souveraineté technologique française: Abandons et reconquête», de Maurice Allègre, que fue jefe de la Délégation générale à l’informatique durante este periodo.
Laurent LAGNEAU
Fuente : Opex360.COM – Zone miliaire
23/01/2024
Aunque el Ministerio de Defensa francés parece confiado, hay que subrayar que Microsoft colabora activamente con la NSA[2]. Ninguna empresa de software ha colaborado tanto con la NSA como Microsoft, por ejemplo proporcionando acceso directo a Skype is Spy Campaign|Skype (Aplicación espía). Pero esa no es la historia que suelen contar los medios de comunicación.
Microsoft proporciona puertas traseras a nivel de sistema operativo, no sólo a nivel de Internet/comunicaciones; la NSA en su conjunto ha llegado a compartir cama con Microsoft (incluso hay cruces de personal) y este gigante tecnológico, Microsoft, también recibe pagos por estos abusos de la privacidad. Por ejemplo de la CIA, basándose en revelaciones claras (filtraciones).
Microsoft espía activamente a las personas, ya sea directamente (por sus propios intereses comerciales) o como intermediario de los gobiernos.
[1] Concepto (alemán) de la OTAN mejorar la defensa colectiva mediante la cooperación multinacional
[2] NSA es la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos
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