Vísperas es un canto de alabanza, de adoración, de acción de gracias. Para el oficio de Nuestra Señora, la Iglesia escogió los salmos de fiestas de la Santa Virgen que nos exhortan alabar a Dios en Cristo y su madre. 

V. Dios te salve, María

Llena eres de gracia

El Señor es contigo

R. Y bendita tú eres

Entre todas las mujeres

Y bendito es el fruto

De tu vientre, Jesús. 

V. Dios mío, ven  en mi ayuda. 

R. Señor date prisa en socorrerme. 

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. 

Como era en un principio ahora y siempre 

Por los siglos de los siglos. 

Así sea.

De Pascuas a Septuagenaria: Aleluya 

De la Septuagenaria a Pascuas: Gloria a Vos, Señor, Rey eterno.

ANTÍFONA 

Santa Madre de Dios, María siempre Virgen, intercede por nosotros ante el Señor Nuestro Dios.

SALMO 109.

Salmo es completamente mesiánico, canta la gloria de Dios hijo que es también el hijo de María, su realeza y su sacerdocio. Jesús es rey, pero su yugo es suave y ligero y es también sacerdote, en la cruz por su sacrificio; en el cielo, por su oración incesante, a los al altar en el altar, por la misa. María es Reina es por ella que Cristo no se hizo de unirse al sacerdocio de su hijo sobre todo en el Calvario como corredentora.  

Palabra del Señor a mi  Señor : «¡*Siéntate a mi derecha y 

ved cómo hago de *tus enemigos la tarima de tus pies!»

Desde Sión extenderá el Señor el cetro de tu mando: *domina en medio de tus enemigos.

«Vuestro es el principado desde el día de Vuestro  nacimiento; *de mí en el monte sagrado Vos has nacido; como nace el rocío de la aurora».

Juró el Señor y no ha de retractarse: «*Vos sois para siempre sacerdote según la orden de Melquisedec».

A tu diestra está el Señor, *aplasta a los reyes en el día de su cólera;

juzga a las naciones: está lleno de cadáveres, y *de cabezas rotas a lo ancho de la tierra.

El bebe del torrente, en el camino, *por eso levanta su cabeza.

Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo. 

Cómo era en un principio ahora y siempre *por los siglos de los siglos. Así sea.

SALMO 112.

Éste salmo fue recitado por Nuestro Señor después de la cena. Alabo al Señor por su grandeza y por su bondad hacia los humildes. Nuestra Señora hace eco en el magnificad: elevó a los humildes. Su maternidad divina es la más sorprendente de esos dones de Dios a los pequeños y humildes. El abono que refiere el salmista no significa siempre una baja condición, más bien la suciedad del pecado.

Aleluya! ¡Alaben, servidores del Señor, *alaben el nombre del Señor!

¡Bendito sea el nombre del Señor *ahora y para siempre!

¡De donde sale el sol hasta su ocaso, *alabado sea el nombre del Señor!

¡El Señor domina a todas las naciones, *su gloria está por encima de los cielos!

¿Quién es como el Señor, nuestro Dios, que se sienta en las alturas, *pero que se inclina para ver lo que es humilde en los cielos y la tierra?

Al pobre lo recoge desde el polvo, *de la mugre retira al 

desvalido,

para darle un asiento entre los nobles, *con los grandes de su pueblo.

Da un hogar a la mujer estéril, *ahora feliz madre de muchos hijos.

Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo. 

Cómo era en un principio ahora y siempre *por los siglos de los siglos. Así sea.

SALMO 121.

Qué fue recitado en primas,se aplica frecuentemente a la Iglesia de la tierra y del cielo. Nuestra Señora también es frecuentemente comparada con Jerusalén, la ciudad santa, porque ella fue “la casa de Dios” cuando el Verbo estuvo en su seno.

¡Qué alegría cuando me dijeron: “*Vamos a la casa del Señor”!

Ya están pisando nuestros pies* tus umbrales, Jerusalén.

Jerusalén, que está edificada
*Como ciudad compacta, bien unida,

A la cual suben las tribus, las tribus del Señor,

*Según el precepto dado a Israel

Para alabar el nombre del Señor.

Porque allí se establecieron tronos para juicio,
*Los tronos de la casa de David.

Oren ustedes por la paz de Jerusalén:
*Sean prosperados los que te aman.

Haya paz dentro de tus muros,
*Y prosperidad en tus palacios».

Por amor de mis hermanos y de mis amigos,
*Diré ahora: «Sea la paz en tí>

Por amor de la casa del Señor nuestro Dios
*Procuraré tu bien.

Gloria al Padre y al Hijo, y *al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
*Por los siglos de los siglos. Así sea.

SALMO 126.

Éste salmo que se hizo ya  a sexta, puede aplicarse a María, “casa y ciudad” Inmaculada, que Dios construyó y protege. Dios recompensó su amor por privilegios inusitados, convirtiéndola en Madre de todos los miembros de Cristo. Seamos hijos de María, como las flechas que llena su aljaba.

Si el Señor no construye la casa *en vano trabajan los albañiles; si el Señor no protege la ciudad, *en vano vigila el centinela.

En vano te levantas tan temprano, *levántate 

Después de haber descansado, vos que coméis 

El pan del dolor.

Por qué es Dios que da el sueño a los que ama. 

*Un regalo del Señor son los hijos, recompensa, el fruto de las entrañas.

Como flechas en manos del guerrero *son los hijos de la juventud.

Feliz el hombre que con tales flechas ha llenado su aljaba, *cuando a la puerta vayan a litigar,

sus contrarios no los harán callar.

Gloria al Padre, *al Hijo y al Espíritu Santo. 

Cómo era en un principio ahora y siempre *por los siglos de los siglos. Así sea.

SALMO 147.

Éste salmo de acción de gracias y de alabanzas puede aplicarse a la Iglesia llena de bendiciones espirituales dadas por el Señor y que por medio de la Eucaristía alimenta sus hijos “con la flor de harina “. también se puede aplicar a Nuestra Señora a la cual rogamos de glorificar al Señor puesto que es su Señor y su Dios, ella que sabe alabar al  Dios que la fortifica, la protege contra el pecado . Él cumplió con ella; las más grandes de las maravillas, también es  Nuestra Señora a que le damos las gracias por todas las obras divinas…con ninguna nación actuó así. 

¡Glorifica al Señor, Jerusalén, *a tu Dios alaba, oh Sión!

El refuerza las trancas de tus puertas y *bendice a tus hijos en tu seno;

guarda en paz tus fronteras, *te da del mejor trigo en abundancia.

Si a la tierra envía su mensaje, *su palabra corre rápidamente;

esparce la nieve como lana y *derrama la escarcha cual ceniza.

En trocitos arroja su granizo, ¿*a su frío quién puede resistir?

Envía su palabra y los derrite, *sopla su viento y corren las aguas.

A Jacob le revela su palabra, *sus leyes y sus juicios a Israel.

Con ningún otro pueblo ha actuado así, *ni les dio a conocer sus preceptos. ¡Aleluya!

Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo. 

Cómo era en un principio ahora y siempre *por los siglos de los siglos. Así sea.

ANTÍFONA. 

Santa Madre de Dios, María siempre Virgen, intercede por nosotros ante el Señor nuestro Dios.

CAPÍTULO.

Exhalé un aroma igual al de la canela , derramé un perfume suave como el de la mirra muy pura.

R. Demos gracias a Dios.

HIMNO.

Salve, del mar estrella.

Salve Madre sagrada de Dios y siempre Virgen. 

Puerta del cielo Santa. 

Tomando de Gabriel el Ave, 

Virgen alma 

mudando el nombre de Eva. 

Paces divinas trata. 

La vista restituye: 

las cadenas desata; 

todos los males quita, 

todos los bienes causa. 

Muéstrate Madre y llegue 

por Vos nuestra esperanza 

A Quien por darnos vida nació de tus entrañas. 

Entre todas piadosa 

Virgen, en nuestras almas 

libre de culpa ,infunde 

virtud humilde y casta. 

Vida nos presta pura, 

camino firme allana. 

Que quien a Jesús llega 

intenso gozo alcanza.

Al Padre, al Hijo, al  Santo 

Espíritu alabanza, 

una a los tres les demos y siempre eternas gracias. 

Así sea. 

V. Rogad por nosotros, Santa Madre de Dios. 

R. A fin que seamos dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo .

ANTIGUA DEL MAGNIFÍCAT.

Santa Madre de Dios rogad por los desgraciados, ayudad a los débiles, consolad a los afligidos, rogad por el pueblo, interceded por el clero, suplicad por las mujeres devotas. 

CÁNTICO DE NUESTRA SEÑORA.

Mi alma glorifica al Señor , 

y mi espíritu se regocija 

en Dios mi Salvador. 

Porque ha puesto los ojos en la bajeza de su 

esclava; por tanto, ya 

desde ahora me llamarán 

bienaventurada todas las generaciones. 

Porque ha hecho en 

mí cosas grandes Aquel

que es todopoderoso, 

cuyo nombre Santo. 

Y cuya Misericordia se 

derrama de generación 

en generación, sobre 

los que le temen. 

Hizo alarde del poder de su brazo, derribó 

a los soberbios del pensamiento de su corazón. 

Desposeyó del solio a 

los poderosos, y ensalzó 

a los humildes. 

A los hambrientos colmó de bienes, y a los 

ricos despidió sin nada. 

Acogió a Israel, su 

siervo. Acordándose de 

su misericordia. 

Según había prometido

 a nuestros padres. 

A Abraham y a su descendencia.

Para siempre. 

Gloria al padre al Hijo y al Espíritu Santo ,como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos. Así sea.

ANTIGUA DEL MAGNIFICAT.

Santa Madre de Dios rogad por los desgraciados, ayudad a los débiles, consolad a los afligidos, rogad por el pueblo, interceded por el clero, suplicad por las mujeres devotas. 

V. Dios mío venid en mi auxilio  (o también se puede decir, La Paz sea con vosotros ) 

R. Señor apresuraos en socorrerme. ( y con vuestro espíritu)

ORACIÓN.

Rogamoste, Señor Dios, que nos conceda a nosotros, Vuestros servidores gozar siempre de salud del alma y del cuerpo y por la gloria intercesión de la bienaventurada María siempre Virgen, ser librados de las tristezas presentes y gozar de la gloria eterna por Nuestro Señor Jesucristo, Vuestro Hijo que siendo Dios, vive y reina con vos en la unidad del espíritu Santo por los siglos de los siglos.

R. Así sea.

DURANTE EL ADVIENTO.

OH Virgen, ¿Cómo es posible? No hay ninguna mujer como Vos ni antes, ni después de Vos …. ¿Hijas de Jerusalén porqué me admiran?

Es porque son testigos de un gran misterio.

ORACIÓN.

Oh Dios, que quisiste que a la palabra del Ángel, Vuestro Verbo se encarnase en el seno de la bienaventurada Virgen María, haced, os rogamos, que, pues la creemos verdadera Madre de Dios, seamos ayudados de Vos por su poderosa intercesión. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor, Vuestro Hijo que con Vos vive y reina en la unidad del Espíritu Santo, Dios. Por todos los siglos de los siglos. 

R. Así sea.

DE NAVIDAD A LA PURIFICACIÓN.

¡Oh misterio inefable de la herencia divina! El seno de la que no conoce varón se ha trocado en el templo de Dios: no se ha mancillado el Verbo al encarnar en ella: todas las gentes vendrán y dirán: ¡Gloria a Vos,Señor!

ORACIÓN.

Oh Dios que por la virginidad fecunda de bienaventurada Virgen María diste al género humano el premio de la salud eterna: concédenos te rogamos que experimentemos los efectos de la intercesión de Aquella por quien recibimos al Autor de la vida Nuestro Señor Jesucristo, Vuestro Hijo, que con Vos vive y reina, en unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. 

R. Así sea.

TIEMPO DE PASCUA. 

Reina del cielo alegraos. Alabad al Señor. Por Aquel que mereciste llevar en Vuestro seno; resucitó, (en tiempo de la Ascención,se dice, « y subió a los cielos » como lo dijo .Alabad Al Señor. Rogad a Dios por nosotros,Aleluya.

V. Dios mío venid en mi auxilio  (o también se puede decir, la paz sea con vosotros ) 

R. Señor apresuraos en socorrerme. ( y con vuestro Espíritu )

V. Bendigamos al Señor.

R. Demos gracias a Dios. 

En caso de que esta sea la última hora que se rece por el momento se dice:

V. Dios te salve, María

Llena eres de gracia

El Señor es contigo

R. Y bendita tú eres

Entre todas las mujeres

Y bendito es el fruto

De tu vientre, Jesús. 

Qué por la misericordia de Dios las almas de los fieles difuntos reposen en paz. 

R. Así sea.