
V. Dios te salve, María
Llena eres de gracia
El Señor es contigo
R. Y bendita tú eres
Entre todas las mujeres
Y bendito es el fruto
De tu vientre, Jesús.
V. Conviértenos oh Dios Salvador Nuestro .
R. Y aleja de nosotros Vuestra ira.
V. Dios mío, ven en mi ayuda.
R. Señor date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos.
De Pascuas a Septuagenaria: Aleluya
De la Septuagenaria a Pascuas: Gloria a Vos, Señor, Rey eterno.
ANTÍFONA.
Oh María, no tenéis igual entre las mujeres: produces flores como la rosa y perfumes como el lirio.
Rogad por nosotros, Santa Madre de Dios.
SALMO 131.
Éste salmo es mesiánico y sus promesas son cumplidas en la persona de Jesucristo y en la Iglesia.
Como lo Salmistas suspiran por el la felicidad de ver el Arca de la Alianza, así mismo buscamos la humanidad del Salvador cerca de su Madre, en Ephrata o en Belén y pedimos que venga su Reino . Nos acordamos así que Nuestra Señora y nuestro cuerpo son el templo de la Trinidad Santa. Dios los escogió para habitar en ellos. No busquemos nuestro descanso fuera de Dios.
Señor, tened en cuenta a David *su total mansedumbre ,
cuando hizo un juramento al Señor, *una promesa al Dios de Jacob:
“No entraré en la tienda, que es mi casa, *ni me tenderé en el lecho donde descanso,
no concederé el sueño a mis ojos *ni descanso a mis párpados
hasta que halle un lugar para el Señor, *una morada para el Dios de Jacob».
Hemos sabido que el Arca está en Efrata, *la encontramos en los campos de Jaar.
Entremos, pues, en su tabernáculo, *lo adoraremos postrémonos ante la tarima de sus pies.
¡Levantaos, Señor, y venid a Vuestro reposo, *Vos y el Arca de Vuestra santidad!
¡Que Vuestros sacerdotes se revistan de justicia y *Vuestros fieles griten de alegría!
Por amor a David, Vuestro servidor, *no aparteís la faz de Vuestro ungido.
El Señor se lo juró a David, verdad de la que no se desdecirá: «*Del fruto de tus entrañas pondré a alguien en tu trono.
Si tus hijos guardaren mi alianza y *mis preceptos que les he enseñado, también sus hijos para siempre se sentarán en tu trono».
Y el Señor escogió a Sión, *quiso que fuera su residencia:
«Aquí está mi descanso para siempre, *en ella moraré, pues yo lo quise.
A las viudas las bendeciré en abundancia y *a sus pobres los saciaré de pan.
De gloria revestiré a sus sacerdotes *y sus santos gritarán de júbilo.
Allí haré brotar el poder de David, *allí pondré una lámpara para mi ungido.
Cubriré de vergüenza a sus enemigos *mientras mi santidad Brillara sobre él.
Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo.
Como era en un principio ahora y siempre
*Por los siglos de los siglos.
Así sea.
SALMO 132.
El salmista canta la felicidad de habitar en Sion y de vivir en la unión fraterna. Sion simboliza la Iglesia, cuyos hijos son todos hermanos en Cristo. Qué felicidad en esta unión que reúne a los católicos entre ellos, los miembros de una misma orden religiosa. El salmista dice que la gracia de esta amistad es como un perfume. “Ubi caritas et amor, Deus ibi est”.
Mirad cuán bueno y cuán delicioso es
*Habitar los hermanos juntos en armonía!
Es como el buen aceite que, desde la cabeza, *va descendiendo por la barba, por la barba de Aarón, hasta el borde de sus vestiduras.
*Es como el rocío de Hermón que va descendiendo sobre los montes de Sión.
Porque ahí, El Señor envía bendición *y vida eterna.
Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo.
Como era en un principio ahora y siempre
*Por los siglos de los siglos.
Así sea.
SALMO 133.
Se canta este salmo en la noche, antes de dejar el santuario para invitar a los padres que habita en el templo a alabar al Señor durante la noche. También nosotros, unámonos a los religiosos que se levantan en la noche para las alabanzas divinas; unámonos o a los santos del cielo que contemplan y cantan sin cesar las glorias de la Santa Trinidad.
Mirad, bendecid al Señor,
*vosotros todos los siervos de Dios,
los que en la casa de Dios estáis por las noches
*Alzad vuestras manos al santuario
y bendecid a Dios.
*Desde Sion te bendiga Dios.
quien ha hecho los cielos y la tierra.
ANTÍFONA.
Oh María, no tenéis igual entre las mujeres: produces flores como la rosa y perfumes como el lirio.
R. Rogad por nosotros, Santa Madre de Dios.
CAPÍTULO.
Yo soy la madre del amor hermoso, de la belleza, del conocimiento, de Dios y de la santa Esperanza.
R. Demos gracias a Dios.
V. Interceded por nosotros, Santa Virgen de las vírgenes, oh María, Madre de Dios.
R. Interceded por nosotros Santa Virgen de las vírgenes oh María Madre de Dios.
V. A fin que seamos dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
R. oh María Madre de Dios.
V. Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
R. Interceded por nosotros Santa Virgen de las vírgenes oh María Madre de Dios.
HIMNO.
Entre todas piadosa
Virgen, en nuestras almas
libre de culpa ,infunde
virtud humilde y casta.
Vida nos presta pura,
camino firme allana.
Que quien a Jesús llega
intenso gozo alcanza.
Al Padre, al Hijo, al Santo
Espíritu alabanza,
una a los tres les demos y siempre eternas gracias.
Así sea.
V. Rogad por nosotros, Santa madre de Dios.
R. A fin que seamos dignos de las promesas de Jesucristo.
V. Después del parto, oh Virgen, permaneciste siempre Inmaculada.
R. Madre de Dios, interceder por nosotros.
ANTÍFONA DEL NUNC DIMITTIS.
(Se Reza de rodillas)
Bajo Vuestro amparo nos acogemos Santa Madre de Dios: no desprecies las súplicas que os dirigimos en nuestras necesidades; más libradnos siempre de todos los peligros o Virgen gloriosa y bendita.
CÁNTICO DE SAN SIMEON.
Ahora, Señor, *sacáis en paz de este mundo ,
*según Vuestra promesa ,por que mis ojos han visto al Salvador, a quien habéis preparado *a vista de todos los pueblos, luz que ilumina a los gentiles y *gloria de Vuestro pueblo Israel.
Gloria al Padre, al Hijo y *al Espíritu Santo.
Como era en un principio ahora y siempre
*Por los siglos de los siglos.
Así sea.
ANTÍFONA DEL NUNC DIMITTIS.
Bajo vuestro amparo nos acogemos Santa Madre de Dios: no desprecies las súplicas que os dirigimos en nuestras necesidades; más libradnos siempre de todos los peligros o Virgen gloriosa y bendita.
V. Dios mío venid en mi auxilio (o también se puede decir, la paz sea con vosotros )
R. Señor apresuraos en socorrerme. ( y con Vuestro Espíritu )
Oremos.
ORACIÓN.
Os rogamos Señor, Dios de misericordia, nos auxilies en nuestra flaqueza, a fin de que nosotros, que honoramos la Memoria de la Santa Madre de Dios, resucitemos por medio de su amable intercesión, del abismo de nuestras iniquidades, por el mismo Jesucristo, Señor Nuestro, Vuestro Hijo que siendo Dios, vive y reina con Vos en la unidad del Espíritu Santo, por todos los siglos de los siglos.
Así sea.
V. Dios mío, ven en mi ayuda.
R. Señor date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos.
V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.
BENDICIÓN.
✝️Que la bendición de Dios todo poderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre nosotros por siempre.
R. Amén.
EN LA PROCESIÓN DESPUÉS DE LAS COMPLETAS.
Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura
y esperanza nuestra: Dios te salve. A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti suspiramos, gimiendo
y llorando en este
valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y, después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre.
¡Oh clementísima! ¡oh piadosa! ¡oh dulce Virgen María! (Aleluya en TIEMPO PASCUAL).
V. Permíteme alabarte, oh Virgen Santa. (Aleluya en TIEMPO PASCUAL).
R. Dame fuerza contra Vuestros enemigos. . (Aleluya en TIEMPO PASCUAL).
ORACIÓN.
Rogamoste, Señor Dios, que nos conceda a nosotros, Vuestros servidores gozar siempre de salud del alma y del cuerpo y por la gloria intercesión de la bienaventurada María siempre Virgen, ser librados de las tristezas presentes y gozar de la gloria eterna por Nuestro Señor Jesucristo, Vuestro Hijo que siendo Dios, vive y reina con vos en la unidad del espíritu Santo por los siglos de los siglos.
R. Así sea.
OH LUZ.
Oh luz de la Iglesia, Doctor de la Verdad, Rosa de paciencia Modelo de esperanza, Marfil de castidad. Vos nos disteis a beber generosamente del Agua de la sabiduría. Predicador de la Gracia, únenos a los bienaventurados.
V.Ruega por nosotros bienaventurado Padre Santo Domingo, (Aleluya en TIEMPO PASCUAL).
R. para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. (Aleluya en TIEMPO PASCUAL).
ORACIÓN.
Rogamoste Señor todopoderoso, nosotros que estamos abrumados bajo el enorme peso de nuestras culpas, seamos consolados por la intercesión de nuestro padre Santo Domingo , Vuestro Confesor.
R.Así sea.
Que las almas de los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en paz. R. Así sea.
LETANÍAS LAURETANAS
Señor, ten piedad de nosotros, Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros, Cristo, ten piedad de nosotros,
Señor, ten piedad de nosotros, Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos, Cristo óyenos
Cristo, escúchanos, Cristo, escúchanos
Dios Padre celestial, ten piedad de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten piedad de nosotros.
Dios Espíritu Santo, ten piedad de nosotros.
Santísima Trinidad, que eres un solo Dios, ten piedad de nosotros.
A continuación, se responderá «ruega por nosotros».
Santa María, ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios, ruega por nosotros.
Santa Virgen de las Vírgenes, ruega por nosotros.
Madre de Jesucristo, ruega por nosotros.
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre sin mancha,
Madre incorrupta,
Madre Inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del buen consejo,
Madre del Creador,
Madre del Salvador,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente,
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de la sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso de honor,
Vaso de insigne devoción,
Rosa mística,
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la Alianza,
Puerta del cielo,
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consuelo de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los ángeles,
Reina de los patriarcas,
Reina de los profetas,
Reina de los apóstoles,
Reina de los mártires,
Reina de los confesores,
Reina de las vírgenes,
Reina de todos los santos,
Reina concebida sin pecado original,
Reina elevada al Cielo,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de la paz,
Reina de nuestra familia,
Nuestra Señora de Guadalupe,
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo.
Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo.
Escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo.
Ten piedad de nosotros.
PROSA.
Inmaculada, intacta y casta, Vos sois oh María,
Puerta del Cielo.
Oh madre venerable y amadísima de Cristo,
recibid los piadosos homenajes de nuestras alabanzas.
Que seamos siempre puros de alma y del cuerpo,
hoy os lo suplicamos devotamente con el corazón y los labios.
Por Vuestras dulces súplicas, obtened la gracia por la eternidad.
Oh muy Misericordiosa, Inmaculada por la eternidad.
(T.P. Aleluya).
V. Interceded por nosotros, Santa Virgen de las vírgenes, oh María, Madre de Dios.
R. A fin que seamos dignos de las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
(T.P. Aleluya).
OREMOS.
ORACIÓN.
Oh Señor Dios , Infundid en nuestra alma Vuestra gracia. Vos, que en la anunciación del Ángel nos habéis revelado la encarnación de Vuestro Hijo, por su Pasión y su Cruz, condúcenos a la gloria de la resurrección. Por Cristo, Nuestro Señor. Amén.
También, durante el tiempo Pascal en los lugares determinados, se puede reemplazar la prosa Inviolata por la antífona siguiente:
Reina del cielo alégrate; aleluya.
Porque el Señor a quien habéis merecido llevar en Vuestro seno;
aleluya.
Ha resucitado según,(En el tiempo de la Ascención : y ha subido a los cielos) lo había anunciado ;
aleluya.
Ruega al Señor por nosotros;
aleluya.
Gózate y alégrate, Virgen María;
aleluya.
Porque verdaderamente ha resucitado el Señor;
aleluya.
Rogad a Dios por nosotros, Aleluya.
OH MARAVILLOSA ESPERANZA.
(El cuarto domingo del mes, después del antífona salve Regina y la oración oh Lumen se canta: )
Oh maravillosa esperanza otorgada a aquellos que en la hora de la muerte os invoca, *vos habéis prometido que después de la muerte , Vos vendréis ayudar a vuestros hermanos. Cumplíd, Padre, aquello que dijistes, escuchad nuestras súplicas. (T.P. Aleluya.)
V. Vos que fuiste ilustrado por tantos prodigios en favor de los enfermos, otorgad un remedio a nuestras almas que sufren, procurándonos la gracia de Jesucristo.
*Cumplid…
V. Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
* Cumplid… (T.P. Aleluya)
V. rogad por nosotros, bienaventurado padre Santo Domingo (T.P. Aleluya)
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo (T.P. Aleluya).
ORACIÓN.
Oh Dios que te habéis dignado iluminar nuestra Iglesia con los méritos y las lecciones del bienaventurado Santo Domingo, Vuestro confesor y nuestro Padre: concedednos que por su intercesión, nunca nos falten los auxilios temporales, y que crezca sin cesar en el progreso espiritual.
Por Cristo Nuestro Señor.
R. Así sea.
ORACIÓN DESPUÉS DEL OFICIO.
El Papa León X concedió a todos aquellos que reciten devotamente, de rodillas, la oración siguiente, después de rezar los oficios, el perdón de todas las faltas de fragilidad cometidas durante su recitación.
ORACIÓN .
Alabanzas sean dadas por siempre, honor, poder y gloria, por parte de todas las criaturas, a la Santísima e indivisible Trinidad, a la humanidad de Nuestro Señor Jesucristo crucificado, a la Virginidad fecunda de la bienaventurada y gloriosa María, siempre Virgen, a todos los Santos, y que nos sea acordado la remisión de todos nuestros pecados por todos los siglos de los siglos.
R así sea.
V. Bienaventurado el seno de la Virgen María, que llevó en su seno al Hijo de Dios.
R. Y bienaventurados los pechos que nutrieron a Cristo Nuestro Señor.
Se dice en voz baja el Padre Nuestro y el ave María.
LAUS DEO
BEATA MARIAE
ET BEATO DOMINICO.